En la década de 1960, Víctor Jara se convirtió en uno de los cantautores más importantes del país. El impulsor del “Canto nuevo”, y que además fue folclorista, director de teatro y profesor, influyó en la escena de las artes en Chile, pero también manifestó constantemente su posición política.
Víctor Jara, hijo de campesinos, se convirtió rápidamente en un referente musical y a sus 30 años ya había dirigido su primera obra de teatro y había sido director artístico del grupo Quilapayún.
El año 1969 fue activo políticamente para Víctor Jara porque, siempre desde las artes, participó en una protesta mundial contra la guerra de Vietnam y compuso una canción sobre la masacre de Pampa Irigoin en Puerto Montt, apuntando particularmente al ministro del Interior Edmundo Pérez Zújovic, del Gobierno de Eduardo Frei Montalva, por la matanza a pobladores de la región de Los Lagos.
El año 1970 participó activamente de la campaña presidencial de Salvador Allende, y durante el Gobierno de la Unidad Popular colaboró en distintos proyectos televisivos y artísticos.
Muerte de Víctor Jara
Tal como ocurrió con miles de adherentes y partidarios del Gobierno de Salvador Allende, Víctor Jara fue detenido los días posteriores al golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973.
Según consta en el expediente judicial que fue ratificado por la Corte Suprema en agosto de este 2023, Jara fue detenido el 12 de septiembre, junto a otros trabajadores y estudiantes de la Universidad Técnica del Estado, donde ejercía sus labores como docente.
Posteriormente fue trasladado hasta el entonces Estadio Chile, hoy llamado Estadio Víctor Jara.
El fallo cuenta que el cantautor fue reconocido como una persona pública por los militares, por lo que “en todo su cautiverio, sufrieron constantes y violentos episodios de agresión física y verbal por parte de los oficiales de Ejército allí presentes”.
“Respecto de Víctor Jara Martínez, las agresiones tuvieron como principal aliciente, la actividad artística, cultural y política del mismo, estrechamente vinculada al recién derrocado gobierno, quien fue sometido a idénticas torturas físicas, siendo los golpes más severos, aquellos que recibió en la región de su rostro y en sus manos, ambas víctimas fueron objeto de patadas, golpes de puño y golpes de culata con armas”, relata el fallo judicial.
“(...) Víctor Lidio Jara Martínez y Littré Quiroga Carvajal, luego se les dio muerte a ambos, hecho que se produjo a consecuencia de, al menos, 44 y 23 impactos de bala, respectivamente, en todos los casos de calibre 9,23 milímetros, según se precisa en los correspondientes informes de autopsia y pericias balísticas, lo que corresponde al armamento de cargo que era utilizado por los oficiales del Ejército que se encontraban en dicho recinto”, añade.
Por la muerte de Víctor Jara, la Corte Suprema condenó a siete exmiembros del Ejército por el secuestro y asesinato del cantautor. Seis de ellos fueron condenados a 25 años de prisión, y el séptimo exmilitar deberá cumplir ocho años de cárcel por ser encubridor del homicidio.
Recordemos que otro exmilitare, Pedro Barrientos, quien se fue a vivir a Estados Unidos cuando terminó la dictadura de Augusto Pinochet, ha sido acusado de ser el responsable directo del crimen de Víctor Jara y, por este caso, la justicia local le quitó la ciudadanía estadunidense que se le había otorgado.
