"(Colombia) ha decidido romper comunicación con el Gobierno legítimo de la República Bolivariana de Venezuela. Yo no tengo comunicación con el canciller (Carlos) Holmes Trujillo. Es una irresponsabilidad que los cancilleres de dos países con una dinámica tan fuerte no nos comuniquemos", se quejó el ministro de Relaciones Exteriores venezolano Jorge Arreaza.
El jefe de la diplomacia venezolana hizo el cuestionamiento público tras participar este domingo en un ensayo para las elecciones de concejales del 9 de diciembre, en las que estarán en disputa casi 2.500 cargos en 335 municipios del país.
Arreaza criticó el silencio diplomático de Colombia una semana después de un ataque de un grupo armado contra fuerzas militares venezolanas en la región fronteriza de Amazonas, el cual dejó tres soldados muertos y 10 heridos.
El presidente Nicolás Maduro dijo que el hecho ocurrió debido al supuesto abandono del Gobierno de Bogotá de las tareas de seguridad en la frontera y responsabilizó a grupos paramilitares, mientras que dirigentes de la oposición se lo atribuyeron a una célula del guerrillero Ejército de Liberación Nacional (ELN) de Colombia.
Arreaza dijo que Maduro le ha pedido a su par colombiano Iván Duque, que deje la "obsesión" con Venezuela, al cuestionar sus declaraciones en las que sostiene que en Venezuela gobierna una dictadura.
Manifestación contra la llegada de inmigrantes en Bogotá
Mientras tanto, decenas de residentes de la localidad colombiana de Engativá protestaban por el traslado que hará a esa zona el próximo martes la Alcaldía de Bogotá de un grupo de al menos 300 inmigrantes venezolanos que permanecen desde hace cuatro meses en un asentamiento en inmediaciones de la terminal de transporte.
"La Alcaldía traslada el problema. El traslado no es la solución", fueron algunas de las frases escritas en pancartas por los manifestantes. Según la secretaria de Integración Social, Cristina Vélez, "el traslado estaba previsto para el viernes anterior pero fue aplazado" debido a que la Policía, que debe acompañar el proceso, estuvo el jueves controlando varias marchas convocadas por estudiantes universitarios.
Según cifras de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), hasta el pasado agosto unos 2,3 millones de personas habían abandonado Venezuela. De estas, cerca de 1,2 millones residen en Colombia, el país que acoge el mayor número de emigrantes venezolanos.