AFP
Dos recientes roturas de ductos transportadores de petróleo en la Amazonía de Perú derramaron el equivalente a 2.000 barriles, informó el lunes el gobierno, que ha calculado que tomará un año recuperar la zona afectada, rica en flora y fauna.
"Lamentablemente, el derrame se calcula en alrededor de 2.000 barriles y ha afectado buena parte de las quebradas de la zona donde se produjo la rotura", dijo a la radio RPP la ministra de Energía y Minas Rosa María Ortiz, quien junto a su colega de Salud, Aníbal Velásquez, sobrevolaron la zona de Chiriaco, en la región Amazonas, donde se produjo una de la roturas del Oleoducto Norperuano, que administra la estatal PetroPerú.
Ortiz reconoció que el panorama en los lugares afectados por los derrames era preocupante, pero señaló que ya ha logrado aislar el crudo, a fin de evitar que continúe avanzando y contaminando ríos y zonas agrícolas.
"Lo que hemos podido constatar en el sobrevuelo que hicimos es que todo el petróleo había sido confinado, ya estaban en trabajos de remoción de las tierras afectadas y van comenzar con los trabajos de remediación", indicó.
La primera fuga ocurrió el 25 de enero en el kilómetro 441 del Oleoducto Norperuano. Impactó plantaciones de cacao y a las aguas que abastecen al río Chiriaco -que desemboca en el importante río Marañón- en el distrito amazónico de Imaza (23.000 habitantes), según la OEFA (Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental).
El segundo derrame se produjo el 3 de febrero en el km 206 del oleoducto, en el distrito de Morona (9.000 habitantes), provincia de Datem del Marañón, región Loreto.
El último fin de semana, el ministro de Ambiente, Manuel Pulgar-Vidal, anunció que se sancionará a PetroPerú y estimó que restaurar la flora y fauna en las zonas afectadas demorará un año.
El alcalde de Datem del Marañón, René Chávez, solicitó al gobierno la declaratoria de emergencia sanitaria debido a la contaminación del río Morona. "Nuestros hermanos indígenas de la zona están sufriendo porque no pueden consumir el agua del río que está contaminada con petróleo", dijo.
El presidente de PetroPerú, Germán Velásquez, rechazó que haya peligro de contaminación en el río Marañón o en sus afluentes. Según la prensa, se estima que aproximadamente 8.000 pobladores fueron afectados por el derrame.