El Presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, consideró este miércoles "ridículo" que exista un éxodo de colombianos a Venezuela comparable al de los africanos que llegan cada año a Europa, como afirmó días atrás su par venezolano, Nicolás Maduro, en el marco de la crisis bilateral. En este marco, tuvo duras palabras hacia Maduro, señalando que la "revolución bolivariana se está autodestruyendo".
"El gobierno venezolano ahora está comparando la llegada de colombianos a Venezuela con el éxodo de africanos a Europa. Esto es absurdo, qué argumento tan ridículo", aseguró Santos en una declaración televisada, rechazando así la acusación de Maduro sobre un supuesto "éxodo humanitario masivo" de colombianos hacia su país.
"¿Cuál éxodo? Sí hay muchos colombianos en Venezuela, como cuatro o cinco millones que están ahí hace mucho tiempo, pero no es que estén yendo en este momento", agregó desde la presidencial Casa de Nariño.
Santos recordó que hace unas tres décadas "muchos colombianos emigraron a Venezuela buscando un futuro mejor", pero ahora ya no es "un país tranquilo, rico, con oportunidades para extranjeros" como lo era entonces.
"Hoy son miles los venezolanos que vienen a Colombia (...). Muchos huyen de la inseguridad, del alto costo de vida, de la escasez, y vienen en busca de libertad, de respeto a la individualidad, al derecho a ser y pensar diferente, a disentir... La revolución bolivariana se está autodestruyendo", subrayó.
Maduro dijo el 1 de septiembre que en su país se generó una "emergencia humanitaria" producto del "éxodo humanitario masivo desde Colombia hacia Venezuela" desde la década de 1950, solo comparable con el éxodo de africanos y asiáticos hacia Europa, según señala la agencia France Presse.
Estimó entonces en 5.600.000 los residentes colombianos en Venezuela. La crisis entre Colombia y Venezuela comenzó el 19 de agosto, cuando Caracas ordenó cerrar parte de la frontera de más de 2.200 kilómetros que divide a ambos países, tras un ataque a militares venezolanos que Maduro atribuyó a "paramilitares colombianos". La tensión aumentó cuando ambos países llamaron a consultas a sus embajadores.
Desde entonces, unos 20.000 colombianos, entre deportados y quienes huyeron por temor a serlo, regresaron de Venezuela, según la ONU. Santos reconoció este miércoles la existencia de violencia y narcotráfico en la frontera, pero dijo que no eran un problema exclusivo de Colombia.
"Que el gobierno venezolano investigue quiénes controlan el contrabando de allá para acá", señaló, reiterando que insistirá "en el diálogo y la diplomacia" para resolver el diferendo, pero sin "irrespeto", "insultos", "payasadas" y "mentiras".
"Cuando nosotros abrimos la puerta al diálogo, la respuesta del presidente Maduro es cerrar aún más la frontera", dijo, sobre el nuevo bloqueo limítrofe decidido el lunes por Caracas y el despliegue de 3.000 militares en la zona. El mandatario dijo haber hablado el martes con el Presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, para agradecerle su disposición a promover un acercamiento. "Pero el Presidente Maduro no le ha pasado al teléfono, como tampoco quiso pasarme a mí al inicio de este conflicto", contó Santos.