El gobierno de Zimbabue confirmó este viernes que el expresidente de ese país de África, Robert Mugabe, murió a los 95 años. El político y militar, que gobernó entre 1980 y 2017 y se convirtió en el jefe de Estado de mayor edad del mundo, falleció en Singapur, donde se encontraba internado hace cinco meses. A su lado estaba Grace, su esposa.
El presidente Emmerson Mnangagwa, quien fue vicepresidente de Mugabe y lo sucedió como mandatario, escribió en Twitter que "con profundo pesar tengo que anunciar el deceso del padre fundador de Zimbabue y expresidente, comandante Robert Mugabe".
"El comandante Mugabe era un ícono de la liberación, un panafricano que dedicó su vida a la emancipación de su pueblo [...] Su contribución a la historia de nuestra nación y de nuestro continente no se olvidará jamás. Que su alma descanse en paz", añadió el mandatario.
Aliados y enemigos
Robert Mugabe tomó las riendas de la antigua Rodesia, tras su independencia, en 1980. Las erráticas políticas económicas que adoptó llevaron a Zimbabue a una de las hiperinflaciones más grandes de la historia.
Abandonado por el Ejército y los fieles de su régimen, sufrió un golpe de Estado que lo forzó a renunciar en 2017, dejando un país sumido en una profunda crisis económica que no deja de agravarse.
Este suceso se produjo en respuesta a la decisión de Mugabe de despedir a su entonces vicepresidente, Emmerson Mnangagwa, en medio de tensiones entre éste y la primera dama, Grace, sobre quién debía ser su sucesor.
Mugabe dimitió el 21 de noviembre y fue reemplazado tres días más tarde por el mismo Mnangagwa, de 76 años, un relevo histórico que provocó el júbilo en las calles de un país próspero que el expresidente había llevado a la ruina