Un impactante caso se destapó en Alabama, Estados Unidos. Las autoridades informaron sobre la desaparición de un niño de un año que fue descubierta solo después de que su familia muriera en un accidente vehicular.
El niño identificado como Kahleb Collins, fue visto por última vez en el mes de septiembre en 2024 en la localidad de Winfield, Alabama, según lo que informó People.
Sin embargo, lo que permitió a la policía enterarse de la desaparición del menor fue el fatal accidente de tránsito en donde murieron el padre del menor, Steven Bradley Collins, y su hermana, RyLeigh Denise Collins. Todo esto en diciembre, más de dos meses después desde que se le habría perdido el rastro.
La madre del niño, Wendy Pamela Bailey, quedó gravemente herida tras el accidente, pero fue detenida tras enfrentar diferentes acusaciones, entre ellas, un cargo por violencia doméstica.
A raíz del impactante descubrimiento que hizo la policía, las investigaciones que se han llevado adelante han permitido concluir a las autoridades que el niño habría sido víctima de macabros abusos por parte de sus padres.
De acuerdo a las indagatorias, por lo menos en una ocasión el menor habría sido fotografiado mientras “colgaba desde un desván con una cuerda”. Las imágenes habrían sido publicadas por su padre en julio, mientras acompañaba los registros con el mensaje, “quiere mudarse. Lo siento mucho”.
Según las diligencias, la propia madre del menor habría comentado la fotografía, señalando, “se ve agotado, cansado y lastimado. Espero que eso sea todo”.
Sin embargo, esas no fueron las únicas publicaciones que realizó el padre respecto a Khaleb. En noviembre, cuando el niño ya se encontraba desaparecido y las autoridades aún no habían sido reportadas, el padre escribió a través de su Facebook que su hijo necesitaba una cirugía dado que estaba enfermo.
“No está creciendo y tiene problemas graves en la espalda. Sus órganos están creciendo, pero su cuerpo no”, escribió a través de su facebook.
“Ténganlo presente en sus oraciones. Ha sido duro y parece que nos espera un largo y duro camino”, sostuvo el padre.
Las autoridades han informado que el progenitor del niño ya había advertido que iba a atentar contra la vida de su hijo. A raíz de esto, la madre del niño enfrenta cargos por abuso de cadáver, abuso infantil agravado y violencia doméstica, además de ser acusada de homicidio por negligencia criminal tras la muerte de su pequeña hija en medio del accidente de autos.
Todo esto mientras que el abuelo del menor también se encuentra en prisión por no denunciar la desaparición de su nieto.
En tanto, la policía aseguró que el niño de un año habría sido asesinado, escondido y luego trasladado hasta un lugar que aún no ha sido localizado.
