En Nueva York, Estados Unidos, el alcalde de la ciudad, Eric Adams, anunció un plan para "retirar de las calles" a las personas sin hogar y que poseen enfermedades mentales, situación que le ha valido una gran cantidad de críticas y cuestionamientos.
Según recoge El País, el edil neoyorquino propuso que las personas con graves trastornos mentales, puedan ser internados en centros psiquiátricos de la ciudad, en contra de su voluntad.
La autoridad explica que corresponde a un plan de 11 puntos que busca resolver "la actual crisis de personas con enfermedades mentales graves que se quedan sin tratamiento y sin refugio en las calles y el metro de la ciudad”
Eso si, el alcalde Adams explica que su plan tendrá una visión compasiva para abordar la crisis, señalando que todas las instituciones que participarán del mismo, como policía, servicios sociales, y otras agencias, serán sometidas a una formación específica.
Asimismo, la ciudad instruirá a que los hospitales para que retengan a los pacientes internados a la fuerza hasta que estén estables, y sean dados de alta solo cuando haya un plan viable para derivarlos a la atención continua.
Donna Lieberman, directora ejecutiva de la Unión de Libertades Civiles de Nueva York, aseguró que la autoridad está “jugando rápido y suelto con los derechos legales de los neoyorquinos y no está dedicando los recursos necesarios para abordar las crisis de salud mental que afectan a nuestras comunidades”
“Las Constituciones federal y estatal imponen límites estrictos a la capacidad del gobierno para detener a personas que padecen enfermedades mentales, límites que es probable que viole la ampliación propuesta por el alcalde”, añadió Lieberman.
"Obligar a las personas a recibir tratamiento es una estrategia fallida para conectar a las personas con el tratamiento y la atención a largo plazo", decretó.