Un perturbador caso se ha dado a conocer en Reino Unido: un hombre decidió impedir el funeral de su amigo y guardar su cuerpo en el congelador durante dos años.

Según recoge BBC, se trató de Damion Johnson (53), quien conocía a John Wainwright (71) desde hace 27 años y vivía con él en un departamento en Birmingham.

Ambos tenían una fuerte amistad y cuando Wainwright murió, Johnson impidió el entierro de su cadáver.

Desde fiscalía, aseguran que el hombre "no estaba dispuesto a dejar ir" a su amigo.

El anciano de 71 años murió en septiembre de 2018, sin embargo, su cuerpo no fue encontrado hasta agosto de 2020, cuando fue descubierto en el congelador en las instalaciones de una empresa de contenedores.

El fiscal afirmó que Johnson no había estado "pensando racionalmente" tras la muerte de su amigo y añadió que "a medida que pasaba el tiempo, había sido incapaz de informar a las autoridades".

El cadáver fue descubierto después que Johnson fuese detenido por otros asuntos en diciembre de 2019.

El cadáver fue descubierto en medio de una mudanza, luego que varias personas acudieran al departamento para realizar comprobaciones de seguridad, donde notaron un fuerte olor que venía del congelador. Aun así, creyeron que se trataba de comida podrida y se llevaron el congelador.

Finalmente, el cuerpo fue descubierto por el personal de mudanza, dando aviso a las autoridades.

Tras las pericias, los forenses encontraron signos de traumatismo por objeto contundente, sin embargo, no lograron determinar cómo ocurrió su muerte.

A la vez, el tribunal fue informado que Johnson utilizó la cuenta bancaria de su amigo poco después de su muerte.

El juez afirmó que impedir un entierro era un delito "inusual", pero no estaba "sugiriendo en absoluto" que el acusado tuviese alguna implicación con la muerte de Wainwright.

"Eso no fue lo que usted hizo. Compró un arcón congelador, un acto deliberado por su parte. Usted sabía lo que iba a hacer", señaló.

"Todo lo que hiciste facilitó la ocultación de ese cuerpo. Nada de lo que hizo contribuyó a que fuera encontrado", añadió.

El juez añadió que impedir el entierro de Wainwright era "un delito tan grave que el único castigo apropiado puede ser la detención inmediata."

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