El candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, relató el jueves con dramatismo su roce con la muerte días antes y dijo que sobrevivió "sólo por la gracia de Dios todopoderoso".
"Se supone que no debería estar aquí esta noche", dijo Trump ante la Convención Nacional Republicana en Milwaukee en su primer discurso desde que fue herido por un tirador de 20 años durante un mitin en Pensilvania el fin de semana.
Trump describió cómo subió al escenario el sábado ante una multitud que le aclamaba mientras sonaba música y comenzaba a hablar sobre las medidas de su administración en materia de inmigración y la frontera sur.
Había una pantalla detrás de él que mostraba un gráfico sobre los cruces fronterizos cuando él estaba en el cargo y giró la cabeza para verlo.
"Oí un fuerte silbido y sentí que algo me golpeaba muy, muy fuerte en la oreja derecha. Me dije: 'Vaya, ¿Qué fue eso? Sólo puede ser una bala'", narró Trump.
Contó que se llevó la mano a la oreja y la bajó, y que "estaba cubierta de sangre, sangre absolutamente por todos lados. Inmediatamente, supe que era muy grave, que estábamos bajo ataque".
Trump: "¡Lucha, lucha, lucha!"
Los agentes del Servicio Secreto corrieron hacia el escenario mientras volaban las balas, abalanzándose sobre él para mantenerlo a salvo, recordó.
"Lo increíble es que antes del disparo, si no hubiera movido la cabeza en ese último instante, la bala del asesino habría dado perfectamente en el blanco, y yo no estaría aquí esta noche. No estaríamos juntos", dijo Trump.
Alabó las acciones de sus seguidores en el mitin, al decir que se giraron para buscar al francotirador en lugar de irrumpir en una estampida. "Ellos sabían que estaba en problemas. No querían abandonarme. Y puedes ver el amor escrito en sus caras. Gente increíble".
"Quería hacer algo para hacerles saber que estaba bien. Levanté mi brazo derecho, miré a las miles y miles de personas que esperaban sin aliento y comencé a gritar '¡Lucha, lucha, lucha!'".
"Por el resto de mi vida, estaré agradecido por el amor mostrado por una audiencia gigante de patriotas que se paró con valentía aquella fatídica tarde".
Trump insistió en que nunca volverá a contar el momento en el que casi pierde la vida.
"Tantas personas me han preguntado: '¿Qué pasó? Dinos qué pasó, por favor", pero "nunca lo escucharán de mí una segunda vez porque de hecho es demasiado doloroso de contar", señaló.