El chileno Nicolás Zepeda volvió a perder la calma y rompió en llanto mientras declaraba ante la justicia francesa, en el juicio por el crimen de la estudiante japonesa Narumi Kurosaki, por el que fue condenado a 28 años de prisión.
Mientras prestaba declaración ante su propio abogado, y posteriormente ante los representantes de la justicia francesa, Zepeda dijo no tener miedo, pero perdió la calma cuando le preguntaron si la joven que desapareció en diciembre de 2016 estaba muerta.
"En realidad, ya no tengo miedo. Hay mucha presión, muchos problemas. Sé que dormiré mejor porque hice lo mejor que pude”, reflexionó.
"Me está volviendo loco, lo único que puedo hacer es intentar defenderme. ¡No podemos saber qué pasó porque estamos demasiado concentrados en mí!¡Yo no la maté!", insistió antes de romper en llanto.
Ahí fue consultado sobre si Narumi está muerta. "Pero no lo sé. ¡Me gustaría saberlo pero no lo sé! La dejé en su habitación, estaba en buenas condiciones...", respondió.
Zepeda, en una primera instancia, fue condenado a 28 años de cárcel por la desaparición y muerte de Narumi. Sin embargo, su defensa apeló a la decisión dando inicio a un nuevo proceso que se espera que termine este 22 de diciembre.
Tanto el abogado del novio de Kurosaki al momento de su desaparición, Arthur del Piccolo, como la representante de la familia de la estudiante han hecho hincapié en el cambio de las declaraciones del chileno como sus motivaciones para viajar a Francia y la compra de fósforos
La desaparición de Narumi Kurosaki
La estudiante Narumi Kurosaki junto a Nicolás Zepeda dieron término a su relación entre septiembre y octubre de 2016, al poco tiempo la joven llegó a Francia, específicamente a la ciudad de Besanzón, a estudiar y donde conoció a quien fuera su pareja al momento de su desaparición: Arthur del Piccolo.
En diciembre de ese año Zepeda viaja a la misma ciudad. En el primer juicio afirmó que se trasladó allá para estudiar, sin embargo, ahora reconoció que mintió y lo hizo para retomar su relación con Narumi.
El 4 de diciembre Kurosaki y Zepeda se encuentran y salen a cenar juntos para posteriormente volver al dormitorio de la joven. En la madrugada varios estudiantes testificaron que escucharon gritos “estridentes, de una película de terror y hasta usaron la palabra asesinato”.
¿Qué dijeron los peritos psicológicos sobre Zepeda?
El doctor Roland C. realizó un examen psiquiátrico a Nicolás Zepeda en el centro de detención preventiva de Orleans donde se encuentra recluido el chileno.
El profesional señala que el chileno parece reservado, pero sociable. Además afirma que al parecer era mucho más tímido cuando era joven y que con el tiempo obtuvo más confianza. “No es peligroso en el sentido psiquiátrico, no necesita ser internado (...) Estaba lúcido y consciente de sus actos”, señaló.
Quien también evaluó a Zepeda fue el psiquiatra, Jean C., quien afirmó que “al señor Zepeda le resultó muy difícil aclarar la profesión de su padre. El señor Zepeda tiene una manera muy complicada de responder preguntas. Respuestas complejas, llenas de desvíos y desvíos”.
“Le pregunté varias veces porque pensaba que lo estaban acusando. Me dijo que no entendía la pregunta”, indicó. Además coincidió con que “no tiene ninguna enfermedad mental, podemos ver muy claramente que estamos ante una persona que tiene tendencia a manipular a los demás, eso es lo que me llamó la atención”.
La última conversación entre Narumi Kurosaki y su madre
Con anterioridad prestó declaraciones ante el jurado la madre de Narumi Kurosaki, Taeko Akiyama de 56 años, quien relató los difíciles momentos que ha vivido junto a su familia tras la pérdida de su hija.
La mujer aseguró que en noviembre de 2016 tuvo el presentimiento que Zepeda viajaría a Francia y en el mismo período conoce de la relación entre Narumi y Arthur de Piccolo, novio de la joven al momento de su desaparición.
Comentó que el 3 de diciembre de 2016 fue la última comunicación que tuvo con su hija y en cinco días no supo de ella. “Mis mensajes nunca fueron leídos, no tuve respuesta”, agrega. Una semana después de eso recibió un “mensaje misterioso” que decía que no se preocupara, que su novio era muy posesivo.
Al día siguiente, del celular de Narumi sale un mensaje hacia su madre explicándole que su nuevo novio se llama Arthur y que irá a Luxemburgo. “Estos mensajes nos resultaban incomprensibles”, afirmó, dado que la joven ya había presentado a su pareja a la familia semanas antes.