El Gobierno de Venezuela confirmó que el presidente Nicolás Maduro no viajará a Argentina para ser parte de la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
A través de un comunicado, el Ejecutivo venezolano indicó que "en las últimas horas hemos sido informados, de manera irrebatible, de un plan elaborado en el seno de la derecha neofascista, cuyo objetivo es llevar a cabo una serie de agresiones en contra de nuestra delegación encabezada por el Presidente de la República, Nicolás Maduro Moros, para lo que pretenden montar un 'show' deplorable, a fin de perturbar los efectos positivos de tan importante cita regional, y así contribuir a la campaña de descrédito -ya fracasada- que se han emprendido contra nuestro gobierno desde el Imperio Norteamericano".
De acuerdo a lo señalado por Clarín, previo a dichas afirmaciones, Maduro también había suspendidos reuniones previstas para este lunes con su par brasileño, Lula da Silva, en Buenos Aires.
A la vez, enfatizaron que Maduro decidió bajarse de la cumbre por cuestiones de seguridad y que, en su lugar, concurrirá su canciller, Iván Gil, quien ya arribó al país trasandino durante la tarde de este lunes junto a otros tres miembros del Ejecutivo.
Cabe destacar que la incertidumbre sobre la presencia de Maduro en la cumbre de la Celac inició durante la semana pasada, luego que la líder opositora argentina, Patricia Bullrich, instara a una detención contra el líder veneozlano.
"Si Nicolás Maduro viene a la Argentina debe ser detenido de manera inmediata por haber cometido crímenes de lesa humanidad. Tal como ocurrió con Pinochet, en 1998", dijo.
A la vez, subrayó que "la Justicia debe actuar en resguardo de la vigencia universal de los Derechos Humanos".