El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, prometió este jueves acabar con el movimiento islamista palestino Hamás, e instó al mundo a tratar a sus milicianos del mismo modo que al grupo yihadista Estado Islámico (EI).
"Tal como el EI fue aplastado, será aplastado Hamás. Y Hamás debería ser tratado exactamente del mismo modo que fue tratado el EI", declaró Netanyahu durante una visita del secretario de Estado norteamericano Antony Blinken.
El ataque de Hamás contra Israel el sábado desencadenó una guerra que ha dejado por el momento miles de muertos, al menos 1.200 en el lado israelí.
"Puede que ustedes sean lo bastante fuertes para defenderse" por sí mismos, declaró Blinken durante su reunión con el primer ministro. "Pero mientras Estados Unidos exista (...) siempre estaremos a su lado", agregó.
El presidente estadounidense Joe Biden prometió un apoyo inquebrantable a Israel, y no pidió que se actúe con moderación contra Hamás.
Sin embargo, Blinken apuntó a la necesidad de un eventual acuerdo de paz, una idea que choca desde hace tiempo con el derechista Netanyahu.
"Cualquiera que quiera paz y justicia debe condenar el reino del terror de Hamás. Sabemos que Hamás no representa al pueblo palestino ni a sus legítimas aspiraciones de vivir en igualdad de condiciones de seguridad, libertad, oportunidades de justicia y dignidad", afirmó Blinken.
El secretario de Estado habló en un tono inusualmente personal para recordar cómo su abuelo huyó de los pogromos antisemitas en Rusia y cómo su padre sobrevivió a los campos de concentración nazis.
"Me presento ante ustedes no solo como secretario de Estado de los Estados Unidos, sino también como judío", explicó.
"También me presento ante ustedes como esposo y padre de niños pequeños. Me resulta imposible mirar las fotos de familias asesinadas", añadió.
Blinken prometió que el gobierno estadounidense y el congreso trabajarán juntos para satisfacer las peticiones militares de Israel, que goza de un amplio apoyo de todos los partidos.