El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, admitió el martes que siete empleados de la oenegé World Central Kitchen del chef hispano-estadounidense José Andrés murieron en un bombardeo israelí "no intencional" en Gaza.
"Lastimosamente ayer (lunes), se produjo un trágico incidente, nuestras fuerzas golpearon de forma no intencional a inocentes en la Franja de Gaza. Esto sucede en una guerra(...), estamos en contacto con los gobiernos y haremos todo lo posible para que no se vuelva a producir", declaró desde el hospital donde fue operado el domingo por una hernia.
"Esto sucede en una guerra (...), estamos en contacto con los gobiernos y haremos todo lo posible para que no se vuelva a producir", añadió Netanyahu.
Las siete víctimas trabajaban para la oenegé World Central Kitchen, con sede en Estados Unidos, que ha estado entregando ayuda alimentaria por mar desde Chipre a Gaza.
La organización anunció tras el ataque que "interrumpe operaciones" en el territorio palestino, sumido en una devastadora guerra desde hace casi seis meses.
Las víctimas son originarias "de Australia, Polonia, Reino Unido, uno con doble nacionalidad de Estados Unidos y Canadá, y Palestina", detalló WCK.
El portavoz militar israelí, el contraalmirante Daniel Hagari, indicó que habló con el famoso chef fundador de WCK, José Andrés, para expresarle su "más sentido pésame".
Añadió que la investigación sería llevada a cabo por el Mecanismo de Evaluación e Investigación de Hechos del ejército israelí y que "compartiremos nuestros hallazgos de forma transparente".
El jefe del Estado Mayor de Israel, Herzi Halevi, "revisará personalmente los resultados de la investigación inicial esta noche", dijo un portavoz del ejército.