Al menos 20 personas murieron y más de 70 fueron hospitalizadas en suburbios del noroeste de Buenos Aires en una intoxicación masiva por cocaína adulterada, presumiblemente con opiáceos, dijeron este miércoles fuentes oficiales.
El último balance es de 20 muertos y más de 70 hospitalizados en ocho centros de salud de la zona, dijo a la AFP un vocero de la provincia de Buenos Aires.
Las autoridades sanitarias emitieron por la tarde una "alerta epidemiológica" por consumo de cocaína alterada con "opiáceos" y sus servicios de emergencia continuaban registrando personas "en grave estado" y provocando una "constante ampliación de personas hospitalizadas".
- "Altísima toxicidad" -
"Hay fallecidos en la vía pública y en domicilios que aún no se pudo identificar", dijo un vocero del ministerio de Salud provincial a la AFP.
La policía detuvo a por lo menos 10 personas en una vivienda en el empobrecido barrio Tres de Febrero, a 40 kilómetros de la capital, donde presume que se mezcló y se distribuyó la cocaína adulterada.
La fiscalía pidió a los compradores de cocaína del populoso cinturón que rodea la capital argentina de unos 14 millones de habitantes que desechen droga adquirida recientemente.
"Se ha determinado que circula una sustancia comercializada como cocaína de altísima toxicidad", dijo la Fiscalía del distrito de San Martín, una de las localidades donde se reportaron muertes, además de Hurlingham y Tres de Febrero.
- "No respiraba casi" -
Las víctimas, entre las que hay varios hombres de entre 30 y 40 años, habrían sufrido violentas convulsiones y paros cardíacos, según reportes médicos citados por varios medios.
Beatriz Mercado contó a la AFP que encontró a su hijo de 31 años tirado en la cocina en la madrugada y lo llevó al hospital.
"Lo encontré tirado en el piso. Mal, muy mal, no respiraba casi, con los ojos hacia atrás", relató. En la noche del miércoles seguía ingresado y con asistencia respiratoria.
El cuñado de María Morales, de 41 años, "está entubado y grave".
"Queremos que salga adelante y que se cure de su adicción", declaró Morales.
Los hospitalizados se distribuían en ocho nosocomios del norte y el oeste del Gran Buenos Aires, detalló un vocero del Ministerio de Seguridad bonaerense.
El secretario de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, explicó que "cada dealer (vendedor) que compra la cocaína, la fracciona. Algunos lo hacen con sustancias no tóxicas, como el almidón. Otros le ponen alucinógenos y si no se tiene ningún tipo de control, pasan estas cosas".
El fiscal general de San Martín, Marcelo Lapargo, describió el hecho como "absolutamente excepcional".
"La gente dice que esto pasa en Centroamérica o en otros lugares, pero (aquí) la verdad que nunca. Puede ser un ajuste de cuentas, pero es conjetural porque no tenemos antecedentes", declaró el funcionario judicial a la Radio Mitre.