La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Emmanuel Macron, defendieron la necesidad de mantener un "diálogo intenso" con EEUU, pese a las discrepancias existentes, y resaltaron las coincidencias con su aliado transatlántico en materia militar y de seguridad. "Es cierto que hay diferencias en algunos aspectos, pero importantes coincidencias en muchos otros", apuntó la canciller en la conferencia de prensa con ocho líderes europeos presentes en Berlín, en una reunión preparatoria para la cumbre del G20.
En parecidos términos se expresó Macron, quien defendió la invitación cursada al presidente Donald Trump para los actos del 14 de julio en París, fiesta nacional francesa, en la que se conmemora también el centenario del final de la I Guerra Mundial, y agradeció que el presidente estadounidense haya aceptado acudir a su desfile militar.
Objetivo: comunicado conjunto
Tanto la líder alemana como el francés expresaron asimismo su esperanza de que, en la cumbre del G20, los días 7 y 8 de julio en Hamburgo, se logre emitir un comunicado conjunto del grupo, que integra a las potencias industriales y a los emergentes, pese a la decisión de EEUU de abandonar el Acuerdo del Clima de París. La postura estadounidense respecto al cambio climático y su apuesta por el proteccionismo, frente al libre comercio, son los principales puntos de fricción entre los aliados europeos y EEUU.
La reunión preparatoria de Berlín congregó a los líderes de Francia, Reino Unido, Italia, España, Holanda y Noruega, además de Merkel, en su calidad de anfitriona, y los presidentes del Consejo Europeo, Donald Tusk, y de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker. Merkel y Macron subrayaron ahí su apuesta por el Acuerdo de París como instrumento para combatir el cambio climático, pese al abandono de EEUU, mientras que el italiano Paolo Gentiloni recordó la situación creada en la pasada cumbre del G7 en Taormina alrededor de esa cuestión. Entonces, EEUU aún estaba en una fase de "reflexión" respecto a si abandonaba o no el acuerdo, apuntó Gentiloni, mientras que ahora la decisión ya está tomada, "lamentablemente en la dirección que nosotros consideramos errónea", dijo Gentiloni.
