La policía de India detuvo el martes a dos personas luego de que un espectáculo de fuegos artificiales en un templo hindú causó una potente explosión que hirió a más de 150 personas, ocho de ellas en condiciones críticas.
Cientos de personas se habían congregado la noche del lunes alrededor del templo hindú de Nileshwaram, en el estado sureño de Kerala, para observar los fuegos artificiales, según videos publicados por la prensa india.
Luego, dentro de un edificio se escucharon crujidos antes de que una enorme bola de fuego emergiera hacia el cielo.
"Alrededor de ocho personas están en condición crítica y 154 personas se reportaron heridas, de las cuales 97 fueron hospitalizadas", indicó a la AFP el jefe policial local, Shilpa Dyavaiah.
"Estallaron fuegos artificiales muy cerca del sitio donde tenían almacenados" los fuegos de artificio, señaló Dyavaiah.
Las chispas de los fuegos alcanzaron el depósito y provocaron la llamarada.
Medios indios informaron de que el incendio causó quemaduras en los rostros y manos de las personas afectadas.
La autoridad gubernamental local K. Inbasekhar aseguró que no se habían otorgado permisos para el espectáculo.
El presidente y el secretario del templo fueron detenidos por el hecho, informó el diario The Hindu.