Este domingo, el candidato Jair Bolsonaro se impuso con un amplio porcentaje de preferencias en la primera vuelta de las elecciones presidenciales de Brasil, alcanzando un 46,03%.
Por su parte, el candidato que le sigue, Fernando Haddad (PT) obtuvo un 29,27%, por lo que ambos pasan a la segunda vuelta que se realizará el próximo 28 de octubre.
Gran parte de Latinoamérica no quedó indiferente ante estos resultados que fueron previstos en distintos sondeos. Sin embargo, lo que más llama la atención es la relevancia que ha alcanzado Bolsonaro en la región, tanto por su ideología como por la puñalada que sufrió a manos de un detractor durante un acto de campaña.
Es por esto que varios políticos chilenos dieron a conocer su opinión luego de la aplastante cifra que posiciona al candidato ultraderechista como el más posible ganador de las elecciones.
El ex candidato José Antonio Kast expresó su alegría en su cuenta de Twitter, señalando que el triunfo parcial de Bolsonaro “es una señal categórica de rechazo a la izquierda fracasada de Latinoamérica. Las personas quieren más libertad, más oportunidades y más sentido común”.
“Es un triunfo de la libertad y la derrota de la izquierda que dejó al país en ruinas”, sentenció.
Por su parte, el senador Manuel José Ossandón calificó a Bolsonaro como "el candidato por la seguridad y los valores” y que los resultados demuestran que “los brasileños se cansaron, despertaron y salieron en masa a decir no más izquierda”.
Asimismo, Ossandón también celebró la derrota de Dilma Rousseff en su carrera al Senado, aludiendo a su relación con el caso Obedrecht que la sacó del poder. Ante esto, Jorge Tarud respondió afirmando que la corrupción responde a una "transversalidad" política, afirmando que esta “alcanzó a prácticamente todos los sectores políticos y empresariales. Eike Batiista, preso, no es de izquierda".
Por último, el ex canciller Heraldo Muñoz hizo hincapié en el candidato del Partido de los Trabajadores, Fernando Haddad, quien para tener una opción de triunfo "tendrá que transformar 2ª vuelta en una nueva elección, con unidad de todos los demócratas…Y aprender las lecciones”.
