Un joven de 15 años murió y dos resultaron heridos de gravedad al estrellarse en un automóvil Maserati robado, cuando circulaban a casi 130 kilómetros por hora y eran perseguidos por la Policía de St. Petersburg, en Florida, Estados Unidos.

A través de un comunicado, la oficina del alguacil del condado de Pinellas detalló que agentes de la patrulla de la carretera intentaron detener el vehículo robado, pero el conductor “aceleró y alcanzó una velocidad de más de 130 kilómetros por hora (80 millas por hora)”.

De acuerdo con la información policial, el adolescente de 15 años Keondrick Lang, quien iba al volante, perdió el control del vehículo, pasó por encima de la acera, golpeó un letrero comercial y el Maserati terminó volcado.  

Los otros ocupantes del automóvil eran Malachi Daniels, de 16 años, y Mario Bonilla, también de 15. Este último fue declarado muerto en el lugar del accidente.

Lang y Daniels fueron trasladados a un centro médico, el primero “con heridas críticas” y su acompañante con “lesiones que amenazan su vida”, detallaron las autoridades, que además sostienen que los agentes “respondieron inmediatamente prestando ayuda a los sospechosos”.

Acerca del robo, que ocurrió el domingo pasado, el vehículo se encontraba con las puertas desbloqueadas y la llave en su interior cuando los adolescentes se lo llevaron.

Una vez dentro del Maserati, se trasladaron hacia el este de la ciudad “sin las luces delanteras encendidas”.

La Policía mostró imágenes del vehículo completamente volcado, mientras a investigación sigue en curso.

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