La empresa farmacéutica Johnson & Johnson anunció, este martes, que tardarán algunos días en tener novedades sobre la vacuna experimental contra el COVID-19 en la que están trabajando y que presentó problemas los últimos días por una “inexplicable enfermedad” en uno de los voluntarios, lo que obligó a detener la investigación.
Tal como había sucedido hace algunas semanas con la vacuna que está produciendo AstraZeneca, un participante de la investigación contrajo una enfermedad, por lo que esta investigación también tuvo que ser detenida.
El jefe de investigación y desarrollo de Johnson & Johnson Mathai Mammen contó que la compañía está trabajando con un equipo de seguridad para conocer más detalles sobre el participante enfermo que se detectó el domingo y que habrá que esperar estos resultados.
“Serán unos días como mínimo para que se recopile y evalúe el conjunto correcto de información”, dijo el investigador según consigna Reuters.
Pese a que desde J&J han dicho desconocer si la persona enferma había recibido la vacuna o un placebo, aseguraron que estas pausas en investigaciones importantes son comunes.
"Siguiendo nuestras pautas, la enfermedad del participante está siendo revisada y evaluada por la Junta de Monitoreo de Seguridad de Datos (DSMB, por sus siglas en inglés) independiente de Ensemble, así como por nuestros médicos internos clínicos y de seguridad", dijeron desde la compañía a través de un comunicado.
“Los eventos adversos, enfermedades, accidentes, etc incluso los que son graves, son una parte esperada de cualquier estudio clínico, especialmente los estudios grandes", agregaron.