AFP
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, está "profundamente alarmado" por la escalada de violencia en la provincia siria de Guta Oriental, donde han muerto más de 250 civiles, entre ellos decenas de niños, desde el domingo, en ataques de las fuerzas de Damasco.
"El secretario general está profundamente alarmado por la escalada en Guta oriental y su devastador impacto sobre los civiles", dijo este martes su vocero Stephane Dujarric.
El balance de la ofensiva de las fuerzas del gobierno sirio y de Rusia, previa a un ataque terrestre contra esta región cercana a Damasco, el último feudo de los opositores al régimen del presidente Bashar al Asad, superó el centenar de muertos civiles solo en la jornada del martes, según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).
"Casi 400.000 personas en Guta Oriental han sido objeto de ataques aéreos", dijo Dujarric.
Sitiados por las fuerzas de Damasco, los residentes de Guta Oriental "están viviendo bajo condiciones extremas, incluyendo malnutrición", agregó.
Guta Oriental fue designada como una zona de desescalada por Rusia, Irán y Turquía, dijo Dujarric, y recordó a todas las partes "su compromiso en este aspecto".
Mientras, el Consejo de Seguridad seguía negociando un proyecto de resolución de un cese al fuego de 30 días para permitir la entrega urgente de ayuda humanitaria.