Un nuevo problema diplomático enfrenta a Arabia Saudita con Irán, luego de que este último país anunciara este domingo que sus peregrinos no participarán este año en la tradición celebración del Hajj hacia la Meca, debido a que Riad no es capaz de garantizar la seguridad de los viajeros. “Hemos esperado en vano hasta ahora por una respuesta de los sauditas”, dijo el ministro de cultura iraní, Ali Jannati.
Según esa autoridad, “el Hajj no será posible este año” pues Riad “bloquea el camino a Alá”. Por su parte, la Organización del Hajj y Peregrinación aseguró que “debido al continuo sabotaje del gobierno saudita, anunciamos que les ha sido negado el privilegio a los peregrinos iraníes de acudir al Hajj este año, y la responsabilidad de esta decisión recae en el gobierno de Arabia Saudita”.
Irán y Arabia Saudita rompieron relaciones diplomáticas en enero, luego de que numerosos manifestantes irrumpieran en la embajada de Riad en Teherán, en medio de protestas por la ejecución en Arabia Saudita del prominente líder espiritual chiita Nimr al Nimr. Las tensiones, que ya estaban desatadas por una estampida el año pasado donde murieron cientos de iraníes, se hace presente también en la lucha por la dominación regional que enfrenta a ambas potencias en Yemen.
Descargos sauditas
Tras la tragedia de 2015, Irán acusó de las autoridades sauditas de ser incapaces de manejar la peregrinación, al tiempo que Riad aseguraba que los iraníes no respetaban las medidas de seguridad necesarias. Este año se han realizado ya dos reuniones entre representantes de ambos países. Sin embargo, la delegación iraní abandonó el reino saudita sin haber llegado a un acuerdo para despejar el tema de la peregrinación este fin de semana.
Por su parte, el ministro de Exteriores saudita, Adel al Jubeir, dijo que Irán demandaba “el derecho a organizar manifestaciones y a tener privilegios, lo que provocaría el caos en el Hajj. Esto es inaceptable”. Jubeir añadió que anualmente Arabia Saudita firma acuerdos con más de 70 países “para garantizar la seguridad de los peregrinos”, algo que Teherán rechazó en esta oportunidad. “Es muy negativo si la intención de Irán desde el comienzo fue encontrar excusas para evitar a sus ciudadanos asistir al Hajj”, añadió el ministro saudita.