Impacto ha generado en España la muerte de un ejemplar de cachalote que varó el 27 de febrero pasado en una playa de Cabo de Palos en cercanías a la ciudad de Murcia.
Los científicos no lograban entender los motivos porqué el animal había fallecido, ya que se trataba de un especímen aún joven que no había alcanzado la etapa adulta. Incluso, su peso era de 6,5 toneladas cuando este tipo de cetáceos puede llegar a superar las 54 toneladas de peso.
Para aclarar dudas, se le realizó una necropsia al animal que medía diez metros de largo y encontraron lo que parece el detonante de la muerte: tenía 29 kilos de desperdicios en su estómago e intestino, principalmente plástico pero también habían cuerdas, sacos y hasta un bidón.
Según indicaron los expertos, la ingesta de estos los objetos serían lo más posibles causantes del deceso, ya que podrían haberle causado una peritonitis o afectar gravemente su aparato digestivo ante la imposibilidad de expulsar los plásticos.
"La presencia de plásticos en mares y océanos es una de las mayores amenazas para la conservación de la fauna silvestre en todo el mundo, ya que muchos animales quedan atrapados entre la basura o ingieren grandes cantidades de plásticos que acaban provocando su muerte", explicó la directora general de Medio Natural de la Región de Murcia, Consuelo Rosauro.
En base a lo que dice el al Real Decreto 139/2011 para el desarrollo del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y del Catálogo Español de Especies Amenazadas, el cachalote corresponde a una especie vulnerable.
Ante este hecho, la Región de Murcia inició una campaña para concientizar sobre la importancia de no arrojar desechos al mar.