Un hombre se prendió fuego este viernes afuera del tribunal de Nueva York donde es juzgado el expresidente Donald Trump, mientras se completaba la selección del jurado que sellará la suerte del republicano en juicio histórico.
El incidente pareció no tener vínculo con el juicio de Trump. Las autoridades indicaron que el hombre se encuentra hospitalizado en situación crítica y que tenía en su poder panfletos de teorías conspiracionistas sobre fraude en inversiones.
La selección de los doce titulares y seis suplentes que juzgarán a Trump a partir del lunes acababa de terminar cuando la TV local empezó a transmitir en vivo imágenes de humo saliendo de lo que reportaba ser una persona en llamas.
"Un hombre se prendió fuego a sí mismo afuera de la Corte Suprema", dijo un portavoz del Departamento de Policía de Nueva York.
Un testigo, que se presentó con el nombre de Davem de 73 años, contó a una periodista de la AFP que vio al hombre arrojar papeles al aire antes de abrir un recipiente, derramar el contenido sobre su cuerpo y prender fuego con un encendedor.
El hecho ocurrió en un pequeño parque frente al tribunal, que las autoridades han vallado para organizar a los manifestantes pro y anti Trump, y también a algunos medios de prensa.
Juicio histórico de Donald Trump
El juez Juan Merchan dijo que una vez concluida la selección del jurado, el lunes podrían empezar los argumentos de apertura del juicio contra el republicano, primer expresidente en sentarse en el banquillo para un juicio penal.
Trump se ha declarado no culpable de los cargos que se le reprochan por supuestamente encubrir dinero pagado a una exactriz porno para comprar su silencio en la recta final de la campaña electoral de 2016 que le llevó a la Casa Blanca.
A su llegada a la corte este viernes, Trump pronunció una airada declaración sobre la orden que le impide atacar a testigos, fiscales y familiares del personal del tribunal, a la que calificó de "muy injusta".
"El juez tiene que retirar esta orden de mordaza", dijo Trump, que tiene un largo historial, incluso mientras era presidente, de hacer declaraciones amenazantes o insultantes contra oponentes privados y públicos.
En su plataforma Truth Social volvió a reclamar en una andanada de publicaciones la impunidad presidencial.
Los miembros del jurado, que empezaron a ser seleccionados el lunes, fueron sometidos a un cuestionario sobre su profesión, lugar de trabajo, diarios que leen y redes sociales que utilizan, que tanto la defensa como la fiscalía han escrutado con lupa para determinar sus inclinaciones políticas.
Para proteger el anonimato de los neoyorquinos seleccionados por sorteo para prestar servicio como jurado, Merchan pidió a los periodistas que no hicieran descripciones físicas de los miembros ni divulguen dónde trabajan.
Ocupado con el juicio en plena campaña, Trump se dice víctima de una "caza de brujas" orquestada por los demócratas para impedirle volver a la presidencia de Estados Unidos.
En las últimas encuestas se encuentra muy igualado con el presidente demócrata Joe Biden para los comicios del 5 de noviembre.
Se espera que el juicio en el Tribunal Supremo de Manhattan dure unas seis semanas durante las que desfilarán testigos como el exabogado y exmano derecha del magnate, Michael Cohen, que puso de su bolsillo los 130.000 pagados a la exactriz Stormy Daniels. Según la acusación, Donald Trump se los devolvió haciéndolos pasar como gastos legales de su empresa.
¿Cárcel o multa?
El magnate republicano se enfrenta a otras tres causas penales, entre ellas por cargos mucho más graves de intento de anular su derrota electoral de 2020 frente a Biden, pero que se han retrasado repetidamente y es poco probable que ahora se vayan a celebrar antes de las elecciones.
Si es declarado culpable, podría enfrentarse a la cárcel, pero lo más probable es que se le imponga una multa. El veredicto del jurado debe ser unánime.
El magnate de 77 años volvió a lamentarse el jueves de tener que estar "en un juicio muy injusto" en vez de hacer estar haciendo campaña.
"El mundo entero está viendo este engaño", dijo, utilizando de nuevo el caso para lanzar sus ataques electoralistas contra el presidente Joe Biden, la inmigración y el sistema judicial.