La policía francesa había anunciado el decomiso de un gran alijo de droga sintética MDMA en un laboratorio clandestino cerca de París.
Pero el hallazgo resultó ser una golosina con sabor a frutilla, dijeron el viernes varias fuentes.
La policía de París había anunciado el miércoles en Twitter que había descubierto un laboratorio de envasado de productos estupefacientes (MDMA, éxtasis) en Saint-Ouen que "abastecía a fiestas clandestinas" y que incautó mercancía por valor de un millón de euros.
El tuit iba acompañado de dos fotos en las que se veían cantidades de polvo rosa y pequeñas pastillas del mismo color en bolsas.
Pero los análisis toxicológicos realizados el jueves concluyeron "que el polvo incautado en el apartamento era un 'polvo neutro', que no contenía productos estupefacientes ni sustancias venenosas", dijo la fiscalía de Bobigny a la AFP.
Se trataba de "fresas Tagada" trituradas, una popular golosina, dijo una fuente cercana a la investigación.