El hijo mayor de Rodrigo Duterte, el polémico Presidente de Filipinas, es investigado por su supuesta conexión con un cartel chino de drogas dedicado a traficar metanfetamina.
La situación que involucra a Paolo Duterte puso en una incómoda situación a su padre, cuya lucha contra el narcotráfico ha sido sangrienta y hasta ilegal.
Pero el mandatario intenta salir del problema con el pragmatismo que lo retrata.
"Mi orden fue: Si tengo hijos involucrados con drogras, mátenlos para que la gente no tenga nada que decir", aseguró Duterte.
Paolo Duterte, quien vicealcalde de Davao, la ciudad más grande del país, fue vinculado al caso por Mark Taguba, quien luego se retractó. De todas formas, el hijo del Presidente debió asistir a una sesión del Senado, donde desmintió bastante molesto su participación en los hechos.
"De una vez por todas, no tengo tiempo para negar ninguna de estas acusaciones sin fundamento en mi contra", aseguró.