Los cuerpos de los tres integrantes del equipo de prensa del diario El Comercio, secuestrados en marzo pasado y posteriormente asesinados en Colombia, llegarán a Quito el próximo miércoles en un vuelo de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE).
Así lo informó hoy el canciller ecuatoriano, José Valencia, en una rueda de prensa en la que confirmó que los tres cadáveres encontrados en la localidad colombiana Tumaco, tras las pruebas de identificación efectuadas, corresponden a Paúl Rivas, Javier Ortega y Efraín Segarra.
El canciller ecuatoriano explicó que un avión de la Fuerza Aérea de su país recogerá los cuerpos para transportarlos de regreso a Quito, donde arribarán a las 10:00 horas del miércoles. Asimismo, expresó las "condolencias y sentimientos de solidaridad más sentidos a los familiares", al tiempo que calificó el hecho de "condenable desde cualquier punto de vista" e hizo un llamado a la unión en etapas difíciles.
"Protocolo de verificación"
"Luego de los trabajos que ha llevado a cabo el Instituto de Medicina Legal, que concluyeron en la madrugada de hoy lunes, se le ha informado a los familiares que los cuerpos pertenecen efectivamente a los tres periodistas ecuatorianos", dijo a la prensa el fiscal general colombiano, Néstor Humberto Martínez.
Según informó el fiscal, la información les fue entregada a las familias de las víctimas y a su representante legal en una reunión privada que tuvieron con funcionarios del Instituto de Medicina Legal y Ciencia Forense, así como con miembros de la Cruz Roja Internacional.
"Con base en esa información científica, continúa la investigación de la Fiscalía General de la Nación (...) Este horrendo crimen no quedará en la impunidad y muy tempranamente actuará la Justicia para que se establezcan las responsabilidades correspondientes", agregó el fiscal.
Los cuerpos encontrados pertenecen al periodista Javier Ortega, el fotógrafo Paúl Rivas y el conductor Efraín Segarra, quienes fueron asesinados hace más de un mes en Colombia tras ser secuestrados en el lado ecuatoriano de la frontera cuando realizaban labores periodísticas.
El cuarto cuerpo está aún sin identificar.