La presidenta del Congreso de Bolivia, Eva Copa, promulgó este jueves la ley de convocatoria a elecciones generales en un plazo de 90 días, luego que la mandataria interina Jeanine Áñez se negara a hacerlo alegando que el país se encuentra en emergencia por el coronavirus.
La norma, que previamente fue aprobada por separado en las cámaras de Diputados y Senadores, "la promulgo para que se tenga y cumpla como ley del Estado Plurinacional de Bolivia", dijo Copa en una ceremonia que contó con la presencia de parlamentarios de la oposición.
La promulgación de dicha ley por parte de la presidenta del Legislativo fue decidida luego que Áñez rechazara la convocatoria a comicios generales.
"En defensa de la vida y la salud de los bolivianos, rechazo las elecciones que ha convocado el MAS (Movimiento Al Socialismo)", escribió en su cuenta de Twitter.
La norma fue aprobada este jueves por el Senado, luego de recibirla de la Cámara de Diputados, que la aprobó un día antes. En ambos cuerpos legislativos el Movimiento Al Socialismo (MAS), partido del exiliado expresidente Evo Morales, dispone de amplia mayoría.
"Hay que hacer elecciones cuando no sean un riesgo de salud. La salud es lo primero", tuiteó Áñez.
El expresidente Carlos Mesa, segundo en la intención de voto, dijo en Twitter que "anteponer el interés político apresurando la elección o pretendiendo su postergación indefinida, es cuestionable e implica un riesgo para enfrentar adecuadamente la crisis que vivimos" por el coronavirus.
La decisión del Congreso, fue precedida por una protesta con ruido de petardos y cacerolas en al menos cuatro importantes ciudades de Bolivia, entre ellas La Paz, Santa Cruz, Cochabamba y El Alto, en contra de la realización de elecciones generales en un plazo de 90 días. El barullo rompió el silencio de una cuarentena total vigente desde el 22 de marzo.
En consideración a la emergencia sanitaria, el tribunal electoral (TSE) había propuesto al Congreso que los comicios se realicen en una fecha entre el 28 de junio y el 27 de septiembre.
Hasta ahora más de mil bolivianos fueron infectados por el virus, que además se cobró la vida de 62 personas.
Áñez asumió temporalmente después que las elecciones de octubre de 2019 fueron anuladas por irregularidades que desataron violentas protestas contra Morales, ahora asilado en Argentina, quien se había declarado ganador pero acabó dimitiendo en noviembre tras casi 14 años en el poder.
En la última encuesta de mediados de marzo de la firma Ciesmori, Luis Arce, delfín de Morales, mantenía el primer lugar de la intención de voto con 33,3%, seguido a gran distancia por el expresidente centrista Carlos Mesa con 18,3% y la mandataria interina de derecha Áñez con 16,9%.