AFP

Barack Obama se reunió el jueves en Riad con los dirigentes del Golfo Pérsico para celebrar una cumbre centrada en la lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico pero también destinada a aliviar las tensiones entre Washington y las monarquías sunitas.

Tras posar en una foto de familia, el presidente estadounidense y los líderes de los seis países del Consejo de cooperación del Golfo (Arabia Saudita, Bahréin, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Omán y Catar) comenzaron una serie de encuentros, tras la cual está previsto que Obama realice declaraciones.

Se espera que la cumbre sirva para que el presidente de EEUU acerque posiciones con sus aliados sunitas, molestos por el acuerdo nuclear con el gobierno chiita de Irán, que implicó el fin del aislamiento de la república islámica y de las sanciones a cambio de concesiones en su programa nuclear.

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