AFP
Hillary Clinton dijo este lunes que no hay nada comprometedor en los correos electrónicos que el FBI está investigando, un hecho que convulsionó la semana pasada la campaña presidencial de Estados Unidos en su recta final.
"Aquí no hay un caso", dijo la candidata demócrata arrancando los vítores y aplausos de cientos de partidarios en un acto de campaña en Kent, Ohio, un estado clave en su carrera para derrotar a Donald Trump en las urnas el 8 de noviembre,
"No estoy inventando excusas. He dicho que fue un error y lo lamento", afirmó sobre su decisión de utilizar un servidor de correo privado mientras era secretaria de Estado, lo que provocó una polémica investigación del FBI.
El jefe del FBI, James Comey, anunció en una carta dirigida a los legisladores que sus agentes estaban revisando nuevos correos, reabriendo un asunto que Clinton tenía la esperanza de haber dejado atrás.
Medios estadounidenses señalaron que los nuevos correos electrónicos fueron encontrados en la computadora portátil de una cercana colaboradora de Clinton, Huma Abedin, cuyo exesposo es investigado por presuntas proposiciones sexuales a una joven de 15 años.
"Ahora, al parecer, quieren revisar los correos de una de mis colaboradoras, y por supuesto, deben revisarlos", dijo Clinton.
"Estoy segura que sacarán la misma conclusión que cuando revisaron mi correo en el último año".
Es la primera vez que Clinton se refirió directamente al caso de los correos desde el sábado, cuando arremetió contra Comey, tildando su actitud de "profundamente preocupante", mientras hacía campaña en otro estado clave, Florida.
La candidata demócrata todavía es favorita para ganar la presidencia pero las encuestas apuntan a una carrera cada vez más difícil.
Clinton utilizó la mayor parte de su discurso en la Universidad de Kent, 60 kilómetros al sur de Cleveland, para pintar a su oponente republicano como no apto para ocupar la presidencia y como una amenaza para la seguridad nacional.