No tardaron en pronunciarse.

Los abogados del expresidente brasileño Lula da Silva dijeron que la sentencia que condena al político a nueve años y seis meses de cárcel es "especulativa" e ignora las pruebas de inocencia a su favor.

El juez federal Sérgio Moro pidió el miércoles que el político vaya a prisión por los delitos de corrupción pasiva y lavado de dinero, tras determinar que recibió aproximadamente US$1,1 millones en sobornos de la empresa constructora OAS, en forma de un remodelado apartamento tríplex en Guarujá, en el litoral de Sao Paulo.

"La defensa manifiesta su más profunda indignación ante la aprobación de una condena que desprecia las pruebas de inocencia que se habían anexado al proceso", dijo el abogado de Lula, Cristiano Zanin, durante una conferencia de prensa en Sao Paulo.

"La sentencia, de 692 párrafos, dedicó solo cinco para la prueba que la defensa hizo sobre la inocencia", detalló Zanin.

Zanin y otros miembros de la defensa de su representado cuestionaron que la condena "dé valor" a la confesión "informal" de Leo Pinheiro, expresidente de OAS, también condenado en el caso, según la agencia de noticias Efe.

"Cualquier juez reconocería la inocencia" de Lula, comentaron. "La sentencia se enfrenta a la Constitución, a tratados internacionales y a las leyes brasileñas. Es ilegítima y creemos que será revertida en algún momento".

Pruebas de la defensa

La defensa también anunció que la condena "será impugnada de todas las formas posibles", de acuerdo a Efe.

Los abogados del expresidente aseguran que el inmueble fue transferido por OAS a un fondo controlado por la estatal Caixa Económica Federal y que "jamás estuvo bajo la disponibilidad de Leo Pinheiro para que se lo entregara a Lula".

El Tribunal Regional Federal de Brasil recibirá la apelación de la parte de Lula y deberá pronunciarse sobre el caso a mediados o fines de 2018.

Hasta entonces, el acusado seguirá en libertad.

El juez Moro emitió su sentencia en el marco del operativo "Lava Jato" (lavado de autos, en portugués), la gigantesca trama de corrupción que rodeó a la petrolera estatal Petrobras y salpicó a políticos y poderosos empresarios de Brasil.

Esta es la primera condena que recibe Lula, que fue presidente de Brasil de 2003 a 2010 y todavía es uno de los políticos más populares del país.

Pero aún afronta otras cuatro causas penales abiertas por la Justicia, la mayoría de ellas relacionadas con el caso Petrobras.

Lula, de 71 años, siempre negó los cargos y se considera víctima de una caza de brujas.

Publicidad