En México, hay 61.637 personas desaparecidas.

El subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas, presentó este lunes una nueva cifra oficial sobre las personas desaparecidas, un 54% mayor a los 40.000 reportados hasta 2018.

El reporte presentado por Encinas incluye informes de desapariciones a partir de los años 60, aunque la mayor parte de los datos corresponde al período iniciado en 2006, cuando empezó la guerra contra el narcotráfico.

La nueva cifra es una actualización tras revisar los informes de fiscalías estatales y depurar las diferentes bases de datos que hay en el país.

Eso permitió encontrar muchos casos de denuncias por desaparición que se clasificaron de forma distinta. También existía un subregistro.

Varias fiscalías no entregaron la información completa a la Comisión Nacional de Búsqueda, el organismo del gobierno federal que atiende el problema.

Es una de las razones del crecimiento en las cifras, explica el funcionario.

Pero además en el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador la desaparición de personas se aborda de forma distinta, afirma Encinas.

"Hay que decirlo, se pretendió durante mucho tiempo minimizar e invisibilizar este problema" destaca el funcionario.

"Eso lleva a otro problema, clasificaron los delitos de manera distinta, no en todos los casos se acreditan como desaparición sino como secuestro o privación ilegal de la libertad".

La cifra de personas desaparecidas puede variar, reconoce el subsecretario Encinas, porque once de las 32 fiscalías del país no han terminado de revisar y depurar la información.

Guerra de carteles

Otra de las razones para la nueva cifra histórica es que no cesa la violencia en el país.

En el primer año de gestión de López Obrador, se reportaron 5.184 personas desaparecidas, una cantidad menor a la de los años anteriores. En 2018, por ejemplo, oficialmente se registraron 5.976 desaparecidos.

Jalisco, el occidente de México, es el estado con más reportes de personas no localizadas con 2.100 casos.

Desde hace tres años en esa entidad hay una disputa interna en el Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), una de las organizaciones de narcotráfico más fuertes del país.

De acuerdo con organizaciones civiles muchos de los casos de desaparición de personas están vinculados a esta batalla.

Pero además, Jalisco es el estado en el que el año pasado de localizó el mayor cantidad de fosas clandestinas.

El informe del subsecretario Encinas señala que el año pasado se encontraron 873 de estos lugares, de los cuales se exhumaron 1.124 cuerpos.

El segundo estado con mayor cantidad de desaparecidos y fosas clandestinas es Tamaulipas, en el noreste del país.

En ese lugar también existe una guerra de narcotraficantes. Los carteles del Noreste (CDN) y del Golfo mantienen desde 2018 una intensa batalla por las rutas de tráfico de drogas a Estados Unidos.

De hecho el pasado fin de semana el consulado de ese país en Nuevo Laredo emitió una alerta de seguridad a los estadounidenses, para que eviten viajar a la ciudad.

Y es que durante varios días hubo combates entre La Tropa del Infierno, el brazo armado del CDN, contra policías estatales.

Sin embargo la violencia por la guerra contra y entre carteles del narcotráfico no es la única causa del problema de las desapariciones.

Alejandro Encinas reconoce que también existe un problema grave con la actuación de policías, responsables de la desaparición de muchas personas.

"Hemos señalado que la mayor parte de las desapariciones están asociadas a gente vinculada con actividades delictivas" señala.

"Pero hay un porcentaje muy significativo de personas desaparecidas por instituciones o agencias del Estado, particularmente en el ámbito local".

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