AFP
El jefe de Policía de Baltimore, este de Estados Unidos, fue destituido este miércoles de su cargo debido al alza de los homicidios y tras las manifestaciones que se desataron en abril por la polémica muerte de un joven negro mientras se hallaba bajo custodia policial.
Anthony Batts fue reemplazado interinamente, con efecto inmediato, por su adjunto Kevin Davis, anunció la alcaldesa de la ciudad, Stephanie Rawlings-Blake.
"No es una decisión fácil de tomar", dijo a la prensa la alcaldesa, pero en estas últimas semanas "siguieron muriendo muchas personas en nuestras calles".
Desde principio del 2015 se han registrado 155 asesinatos y 300 tiroteos. El año pasado, en el mismo periodo, hubo 105 homicidios y 163 tiroteos.
Batts fue designado en su cargo en Baltimore en septiembre de 2012. Su objetivo era modernizar la policía municipal, la octava más importante de Estados Unidos.
Anteriormente, se desempeñó como jefe de policía de las ciudades californianas de Long Beach y Oakland.
En Baltimore (estado de Maryland y con población de 622.000) Batts fue muy criticado por su gestión ante las manifestaciones que se desataron tras la muerte del joven negro, Freddie Gray (25 años), luego de ser arrestado por la policía en abril.
Seis policías fueron inculpados por esta muerte, calificada como "homicidio".
La muerte del joven desató en Baltimore una ola de manifestaciones, varias de tono violento, en las que se denunció el racismo y la brutalidad de la policía local.
Unas horas antes de que se anunciara el despido de Batts, el sindicato de policía de Baltimore (Orden Fraternal de la Policía) publicó un informe en el que acusa al jefe de policía y a la alcaldesa de no haber formado adecuadamente, equipado y apoyado lo suficiente a los agentes para enfrentar esas protestas.
Pero Rawlings-Blake negó que la publicación de este informe esté vinculada con la destitución de Batts.