La búsqueda de las más de 40.000 personas desaparecidas en México debe ser una "prioridad ineludible", dijo el lunes la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet.
La ex presidenta de Chile instó al gobierno mexicano a redoblar esfuerzos para acabar con las violaciones de derechos humanos, después de firmar junto con el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, un acuerdo para que la ONU dé asesoramiento en el caso de los 43 estudiantes desaparecidos en 2014 de la escuela de maestros de Ayotzinapa, en el sureño estado de Guerrero.
Bachelet lanzó frente a los padres de los 43 estudiantes y funcionarios "un llamado a todos a asumir la búsqueda de las personas desaparecidas como una prioridad ineludible".
"Prácticas como tortura, malos tratos y actos de obstrucción de la justicia no tienen cabida en un estado comprometido con los derechos humanos", añadió Bachelet, víctima de tortura junto a su madre durante la dictadura de su país (1973-1990).
Su oficina en México "será una aliada que no dudará en contribuir para que se den los progresos y los avances necesarios" en las averiguaciones sobre el caso de Ayotzinapa, pero también "alertará de cualquier incumplimiento" por parte del gobierno mexicano, concluyó.
El caso de Ayotzinapa sigue sin resolver después de más de cuatro años del crimen.
La noche del 26 de septiembre de 2014, los 43 jóvenes se encontraban en Iguala, Guerrero, a bordo de un autobús que fue baleado por policías corruptos y sicarios.
Después todos habrían sido entregados a narcotraficantes, quienes los habrían asesinado para luego incinerar sus cuerpos y arrojar sus cenizas a un río. Sin embargo, esa versión fue rechazada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la ONU, otros organismos y los padres.
Por su parte el canciller mexicano aseguró que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador busca "verdad y justicia" en todos los casos de desaparición.
Centenas de fosas clandestinas
Según el gobierno, se han descubierto 1.100 fosas clandestinas en la última década en México, y unos 22.000 restos humanos no han sido identificados.
En marzo, el izquierdista López Obrador anunció el lanzamiento de un sistema para buscar e identificar a los miles de desaparecidos.
México ha sido golpeado por una ola de violencia en los últimos años. Desde que se lanzó un polémico operativo militar antidrogas en diciembre de 2006, suman cerca de 250.000 asesinatos en el país, según cifras oficiales, que no detallan cuántos casos estarían ligados al crimen organizado.
La cifra de desaparecidos es de más de 40.000.
Bachelet realiza una gira de cinco días en México que concluirá el martes con una conferencia de prensa en la que hablará de sus impresiones tras reunirse con migrantes, víctimas de tortura, detenciones arbitrarias y familiares de desaparecidos, entre otros afectados por la violencia que azota al país.
Por la tarde del lunes se reunió con el presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, Luis Raúl González, quien abordó en la reunión la necesidad de velar por los derechos de los indígenas ante mega proyectos, de acuerdo con un comunicado de esa institución.
El gobierno de López Obrador llevará a cabo una consulta popular a indígenas de la Península de Yucatán sobre el polémico Tren Maya, proyectado como uno de los principales planes de desarrollo para la empobrecida región sur-sureste del país.
Pero agrupaciones de indígenas consideran que ese mega proyecto pretende despojarlos de sus territorios y dañará la biodiversidad de esa región.
González también expresó a Bachelet su rechazo a la prisión preventiva, que se efectúa con mucha regularidad en México, porque "trasgrede" la presunción de inocencia y el derecho al debido proceso, dijo el comunicado.