El multimillonario empresario estadounidense Robert Durst aceptó este lunes ser llevado desde Nueva Orleans hasta Los Ángeles para enfrentar el cargo de homicidio en primer grado por los asesinatos de su esposa, una amiga y un vecino.

Durst siempre había sido sopechoso de las desapariciones y muertes de estas personas, pero nunca había sido comprobada su culpabilidad hasta que la confesión se le escapó en medio de la grabación de un documental sobre su vida, según consigna la cadena NBC.

“Los maté a todos, por suspuesto”, esas fueron las palabras que hicieron caer al empresario de 71 años. El documental The Jinx: the Life and Deaths of Robert Durst (La Maldición: vida y muertes de Robert Durst) pretendía explicar la polémica vida del millonario, pero fue su final lo que más acaparó la atención del público y, principalmente, de la policía.

Una vez que finalizó una entrevista a Durst para el film, este fue al baño sin darse cuenta de que el micrófono seguía abierto. Allí empezó a decir algunas frases, en apariencia inconexas, pero que concluían con la confesión de sus crímenes.

Ya está. Te atraparon. Tienes razón, por supuesto. Pero, no puedes imaginarlo. Arréstenlo. No sé lo que hay en la casa. Yo quiero esto. Qué desastre. Él tenía razón. Me equivoqué. Estoy teniendo dificultades con la pregunta. ¿Qué demonios hice? Los maté a todos, por supuesto”, dijo.

Antes de que el documental fuera emitido por televisión, el FBI montó un operativo y capturó a Durst en un hotel de Nueva Orleans. El juez de la localidad ordenó que el empresario permanezca detenido sin derecho a fianza hasta que se fije una audiencia.

A pesar de que Durst aceptó ser trasladado a Los Ángeles para ser procesado, su abogado aseguró que lo revelado involuntariamente por su cliente no cambia su supuesta inocencia.

Audio con la confesión de Durst.
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