1. Antecedentes
Uno de los temas más polémicos con respecto a la migración en Chile es la participación de los extranjeros en delitos, y en caso concreto, su porcentaje en recintos carcelarios. Para ello, es importante entender que, según el INE, a diciembre del año 2014 existían 410 mil extranjeros residentes en Chile. En abril del 2017, según los datos del CENSO, eran 745 mil, y a diciembre 2018 1,29 millones, para llegar a 1,48 millones en el año 2021.
Gráfico 1: Cantidad de extranjeros residentes por año
Fuente: INE
Ahora bien, con respecto a quienes no ingresan como residentes y eligen entrar a Chile de forma ilegal, el ingreso clandestino fue creciendo, con el actual año 2022 en proceso en un máximo histórico: 38 mil ingresos de este tipo en los primeros 8 meses del año.
Estos datos de flujos migratorios e ingresos clandestinos son relevantes porque en cierta medida exponen cómo aumentaron explosivamente los ingresos de forma sostenida entre 2014 y 2019, y después el ingreso clandestino. Sin embargo, éste no se materializa en expulsiones por ingreso clandestino, ya que han existido solo 9 expulsiones administrativas por ingresar por paso no habilitado entre abril y agosto de 2022, generando una impunidad y una falta de control fronterizo que dificulta la correcta convivencia entre nacionales y extranjeros y la seguridad de nacionales y residentes.
1. Evolución
Analizando el dato de los extranjeros privados de libertad, en los datos entregados por Gendarmería al 31 de octubre de 2022, se observa que, de los 45.196 internos, 5.093 son de nacionalidad extranjera, lo que representa el 11,3% del total de la población residente. Cabe destacar que los 1,48 millones de extranjeros representan un 7,5% de la población de nuestro país, por lo que existe una mayor representación de extranjeros en recintos penitenciarios con respecto a los nacionales que el promedio nacional de residentes.
Gráfico 2: Personas privadas de libertad por país de procedencia (11,3% extranjeros en población penal vs 7,5% extranjeros residentes en Chile)
Fuente: Estadística General, Gendarmería de Chile. Disponible en https://www.gendarmeria.gob.cl/car_personas_pp.html
A su vez, los 5.093 extranjeros privados de libertad representan el 0,344% de los extranjeros en nuestro país, una cifra proporcionalmente mayor a los 41.925 nacionales que representan el 0,213% de los chilenos en recintos penitenciarios.
Sobre la calidad procesal, el 64,1% de los extranjeros está imputado y el 35,9% condenado.
En términos de nacionalidad, los extranjeros que más presencia tienen en las cárceles chilenas son ciudadanos colombianos con 1.459 que representan al 29% del total de extranjeros en recintos penitenciarios. En segundo lugar, están los bolivianos con 1.386 (27%), seguidos de los ciudadanos venezolanos con 1.141 (22%).
En términos de evolución, se observa un crecimiento explosivo de extranjeros privados de libertad a partir del año 2022, donde en enero 2019 existían 3.379 internos. En enero de 2022 esta cifra llegó a 3.941. Sin embargo, en octubre 2022 subió a 5.093, es decir, un aumento de un 30% solo en lo que va de este año.
Gráfico 3: Comportamiento en el tiempo de extranjeros privados de libertad
Fuente: Estadística General, Gendarmería de Chile. Disponible en https://www.gendarmeria.gob.cl/car_personas_pp.html
1. Análisis por región
Los datos regionales nos muestran que cada una tiene características distintas. Las 4 regiones con más extranjeros que son población penal también son las cuatro regiones en que tienen más de un 10% de población extranjera con respecto al total de la población: es decir, Arica y Parinacota, Tarapacá, Antofagasta y la Región Metropolitana. Se suma la región de Atacama con un alto porcentaje de población penitenciaria extranjera.
Sorprende enormemente que el 44,9% de la población carcelaria en Tarapacá sea extranjera, un 30,1% en el caso de Arica y Parinacota, 27,7% en Antofagasta, 13,5% Atacama y 11% en la Región Metropolitana.
Tabla 3: Cantidad de extranjeros privados de libertad por región y % con respecto al total de reclusos
Conclusiones: “El crecimiento de la población extranjera que está privada de libertad, especialmente en la macrozona norte es bastante preocupante, especialmente por los discursos voluntaristas que niegan la existencia de extranjeros que cometen delitos en Chile. Basta revisar las redes sociales para toparse con estudios brutalmente desactualizados, realizados con la CASEN 2017 (donde había menos de la mitad de los extranjeros residentes) o con datos de la fiscalía al 2020, que ignoran los ingresos clandestinos de los últimos 18 meses”.
- “Que existan extranjeros que no vienen a aportar a nuestro país es una realidad y se debe enfrentar con la verdad, tomar medidas para hacernos cargo de la realidad y no replicar la medida de Suecia donde la policía ocultaba los acosos sexuales para no desvelar que los autores eran extranjeros con otra visión sociocultural. El negacionismo migratorio o la política del avestruz de esconder la cabeza en la arena y cuestionar esta realidad solo genera mayores problemas de cohesión, por lo que hay que ser tajantes en que habrá sanciones -y no ocultamiento ni impunidad- con estos casos”.
- “Por ello es extraña la medida del gobierno, donde no existe ningún plan para mejorar el control de fronteras más allá de hacer un “registro biométrico” como primer paso para generar un perdonazo masivo de los extranjeros que ingresan clandestinamente, y que desde el ministerio de Justicia su propuesta es devolver a su país de origen a los extranjeros condenados, así vaciando las cárceles, pero sin hacerse cargo que estos extranjeros vuelven en libertad y que es extremadamente fácil volver a Chile con total impunidad. Basta recordar el caso de “El Lágrima”, extranjero deportado en julio tras condena por robo con intimidación y abuso sexual de una menor de 16 años, que en octubre es detenido por delito de robo con violación, solo 3 meses después de su expulsión judicial”.
- “La migración es una gran oportunidad, pero debe enfrentarse con datos, trabajando con comunas y barrios, escuchando las necesidades de los ciudadanos, y sin voluntarismos negacionistas de que existe una minoría que comete delitos y se debe hacer cargo de esta realidad”.
La mirada del ex director de Migraciones. Álvaro Bellolio, quien fuera director de Migraciones entre mayo de 2021 y marzo de 2022 en el segundo gobierno de Sebastián Piñera, marca posiciones respecto a las estadísticas que revela este inédito informe y apunta de manera crítica a la administración Boric por el manejo de esta agenda.
- “Este estudio refleja, con datos actualizados, que existe un porcentaje de extranjeros que no viene a aportar a nuestro país, y que el 11,3% de los privados de libertad sea de nacionalidad extranjera, muy superior al 7,5% que representan como residentes en Chile, es que nos debemos hacer cargo de esta realidad”.
- “Es positivo que con datos actualizados podamos observar lo que ocurre en el norte, y que hay que tomar medidas concretas. La cantidad de extranjeros que comete delito en Chile debe ser 0, y si alguno lo realiza, que cumpla su condena completa en su país de origen, pero lamentablemente la defensa para evitar expulsiones, el negacionismo con respecto a las dificultades de la migración o el uso malintencionado de datos desactualizados genera graves consecuencias en la relación de nacionales y extranjeros”.
- “Es de esperar que el gobierno deje de avanzar en su propuesta de regularizar a través de un “perdonazo” y de expulsar en libertad a los extranjeros mientras no se haga cargo del control fronterizo y retome las expulsiones por ingreso clandestino y las reconducciones, sino veremos cómo estos números siguen aumentando”.
