El estudiante de Derecho de la Universidad Católica, Bautista Guerrero, es una de las tres personas que acompañaba al Sebastián Piñera en el accidente de helicóptero que le costó la vida el martes al ex Presidente. Allí, Bautista viajaba junto a su padre, el empresario y amigo de Piñera, Ignacio Guerrero, y la hermana del ex Mandatario, Magdalena Piñera Echenique.
Todos habían almorzado durante la tarde en la casa del empresario José Cox, en el sector de Ilihue, al sur del Lago Ranco. Para entonces llovía intensamente en el lugar. Más tarde Piñera piloteó el helicóptero que cayó en el lago.
En diálogo con El Mercurio, y en el marco de la despedida al ex Presidente en el cementerio Parque del Recuerdo, Bautista Guerrero -quien fue calificado como “un verdadero héroe” por su padre- contó nuevos detalles en torno relató cómo fue el accidente.
- “Todo fue muy rápido. Caímos al agua. Y ahí logré abrir la puerta del helicóptero”, señaló, indicando que solo un par de minutos después de que la aeronave despegara “por poca visibilidad dimos la vuelta donde se podría ver mejor sobre la costa y ahí nos topamos con el agua”. De acuerdo con hallazgos de la fiscalía, el helicóptero habría alcanzado a volar apenas 90 segundos.
- “Lo último que escuché bien es que (el exPresidente) cambiaría de rumbo. Después pudo haber dicho algo más, pero yo no escuché”, agrega.
- Bautista Guerrero indica que la aeronave cayó al agua, pero que no fue un golpe fuerte. El problema es que quedó inclinada hacia el lado donde estaba el exMandatario, con las puertas de esa parte bajo el lago. Así, comenzó a hundirse.
- Bautista Guerrero cuenta que, justo antes de abordar en el viaje de ida hacia la casa de Cox, el exPresidente Piñera le explicó qué debía hacer con las puertas en caso de emergencia como una caída al lago. Esa explicación fue clave para salvarle la vida.
- “Abrí la puerta primero, luego me quité el cinturón y, al llenarse el helicóptero, salí. Los audífonos se me salieron solos”, indica.
- Mientras se hundían, lograron salir primero Ignacio Guerrero y luego Magdalena Piñera. “Fue todo muy rápido, el agua era oscura y profunda”, señala.
- No alcanzaron a nadar hasta la orilla porque los rescataron la lancha del empresario José Cox y una más que también había llegado al lugar. En ese momento, el helicóptero ya no se veía.
- Al llegar a la orilla, dice que estaban “todos muy mal con la pena. Ya sabíamos que (el ex Mandatario) había fallecido”.
En conversación con Ex-Ante en la Catedral Metropolitana, el empresario Ignacio Guerrero señaló, entre otras cosas, que siente “pena, tristeza. Siento rabia y culpa. Me pregunto ¿por qué no hice esto? Y si hubiera hecho esto, no habría pasado lo otro. Bueno, indudablemente, si yo hubiera dicho ‘no nos vamos”.