Carla Jara sorprendió esta semana al brindar una nueva entrevista donde se refirió a su quiebre con Francisco Kaminski, la infidelidad de éste con Camila Andrade y la relación que el comunicador mantiene con el hijo de ambos.
"Mi único error fue haber sido una muy buena mujer. Hubo momentos en que Francisco lo pasó mal, que tuvo problemas económicos, familiares, y ahí estuve siempre para apoyarlo". Esta es una de las declaraciones que Carla Jara entregó en el número de junio de la Revista Velvet, donde además ocupa la portada y 10 páginas con una sesión de fotos.
En la entrevista, Jara habla del dolor de la separación y también del impulso a su carrera además de eventos y campañas publicitarias con distintas marcas, en junio debutará con su podcast 'Entre amigas y copas', que irá todos los jueves y donde tratará diversos temas femeninos. Junto con ello, está pronta a lanzar la segunda edición de su cuento infantil 'El monstruo asustoso', que ayuda a los niños a manejar sus miedos.
Jara afirma que su relación de 11 años estaba bien antes del quiebre. "No había tal desgaste. O sea, él no viajó obligado de vacaciones a Brasil. Pasamos Navidad y Año Nuevo juntos, pedimos deseos pensando que este año sería increíble para los tres como familia (…) Por mi lado, nunca dejé de amarlo, de admirarlo; me seguía gustando como hombre. Para mí, mi matrimonio estaba perfecto", afirmó la ex Mekano.
Sobre si hubo señales, identifica una: "Quizás en un momento lo vi con más ganas de carretear y se lo dije. Sentí que necesitaba salir. Pero yo lo acompañaba, a pesar de que muchas veces no quería".
"Tampoco era la mujer perfecta, le ponía los límites en cosas que consideraba importantes, como el alcohol, por ejemplo. Tal vez en ese tema no lo dejé ser, pero si llevaba cuatro piscolas, tenía que decirle que parara, que al día siguiente había que levantarse temprano o ir a trabajar", dice Carla.
El alejamiento de Kaminski con su hijo
El mayor dolor de Jara es la distancia de Kaminski con su hijo. "Sólo puedo decir que Mariano es grande, tiene 10 años y se da cuenta de lo que ocurre. Sin ir más lejos, fue él quien descubrió el primer mensaje en su celular".
"Jamás le hablaría mal de su padre, al contrario. Todo el tiempo le digo: 'Tu papá te sigue amando, no ha podido venir porque está ocupado, está trabajando…'. No quiero que se sienta abandonado, como le ocurre hoy. Por ello solicité una mediación a través del tribunal de familia, para llegar a un buen puerto".
Carla Jara va más allá: "Francisco tiene mucho trabajo por hacer. Debe tratar sus traumas de niño y ser sincero para que logremos ese equilibrio. Hace varios años que no habla con su papá. Y si bien yo tampoco tengo vínculo con el mío desde los siete años, me preocupé de sanar esa relación. No siento rabia ni rencor, y es porque hice terapia. 'Kami' nunca se preocupó de sanar a ese niño interno que tanto sufrió".
Deudas y pendientes que Kaminski tiene con Carla Jara
Frente a la deuda millonaria de más de $150 millones que Francisco Kaminski mantiene con Jara, ella cuenta: "Hasta el día de hoy no sé en qué gastaba esa plata, porque tampoco llevábamos una vida de lujos. (Decía) que debía pagar cosas de una fábrica de cecinas que tenía con su hermano y que, a fin de mes, una vez que le entrara plata por unas facturas, me devolvería el dinero".
"Otra deuda que tiene conmigo es cuando trajo a Chile al grupo Rombai. Fueron muchos millones, en que tuve que vender uno de mis departamentos, ya que yo era su aval".
Frente a la condena que su ex marido ha recibido en redes sociales, ella afirma: "No me alegro. No soy rencorosa ni vengativa. Tampoco te voy a negar que me he reído con algunos memes… Sin embargo, creo que cada uno tiene lo que se merece. Y sigue cometiendo errores. Si hablara con la verdad, sería más fácil porque lo hubiesen entendido, pero continúa intentando justificar lo injustificable".
Jara confiesa que se ha alejado de algunos cercanos: "Se han ido amigas que no han entendido la situación. Una llegó a decirme que quizás porque le pintaba el mono con el copete, se aburrió. A otra la eché de mi casa por sus comentarios y no le he vuelto a hablar. Soy de una línea, y si algo me molesta de una persona corto por lo sano y la elimino de mi vida".
Este es el segundo divorcio que enfrenta. El anterior, con el futbolista Kike Acuña, también se originó en una infidelidad. "Viví una separación anterior también por infidelidad, y algo aprendí de eso para sobrellevar mi quiebre actual. Y si bien en ese momento no tenía hijos y tuve más tiempo para llorar, siempre me he apoyado con especialistas. En esta oportunidad, a la semana estaba con psicólogo y psiquiatra; sola no hubiese podido. Lo más importante es botar la pena y entender por qué sucedieron las cosas", declaró.