El Glasgow Rangers se proclamó campeón de Escocia por primera vez desde 2011, luego del empate en Dundee (0-0) de su gran rival, el Celtic, vencedor de los últimos nueve títulos.
Luego de su triunfo (3-0) sobre el Saint-Mirren el sábado, al equipo entrenado por el exjugador del Liverpool Steven Gerrard solo le faltaba un punto para asegurarse el título.
Tras su empate contra el Dundee (8º), el Celtic se sitúa a 20 puntos con solo seis partidos por jugar y por tanto, ya no puede dar la vuelta a su desventaja.
El título corona una temporada en la que el Rangers se mantiene invicto y donde ha ganado 28 de sus 32 partidos.
También es el regreso a lo más alto del club con más títulos de la historia en Escocia (55), nueve años después de un descenso administrativo que le llevó a la cuarta división.
El club se reconstruyó rápidamente, pudiendo contratar en 2018 a Gerrard, lanzando su carrera de entrenador.
Este título en la Scottish Premiership es el primer trofeo conquistado por Gerrard como entrenador, luego de una nutrida carrera como futbolista (una Liga de Campeones, una Copa de la UEFA, dos Copas de Inglaterra y tres Copas de la Liga).
Con este triunfo liguero del Rangers se pone fin a un reinado de nueve años del Celtic, que era campeón desde 2012.