Una gran controversia se generó durante la noche de este viernes tras el triunfo por 4-2 de Curicó Unido ante Universidad de Concepción.

Y es que al margen del abultado resultado, la polémica se instaló sobre el árbitro del compromiso, Francisco Gilabert, que fue acusado por el defensa uruguayo del "campanil", Alexis Rolín, de haberle propinado insultos racistas durante el compromiso.

En conversación con CDF, el zaguero se mostró molesto y aseguró que "estaba mirando al árbitro en un córner y me dijo 'negro feo', a la cara. Es un atrevido de mierda (sic)".

Sin embargo, Mario Parra, defensor de Curicó Unido, desestimó tales comentarios por parte del juez.

En entrevista con La Tercera, aseguró que Rolín "era mi marca. Claramente la acusación es grave. Lo que yo vi y escuché se produjo de una jugada típica de agarrones en el área. Ellos pidieron penal y se fueron en contra de Gilabert".

"Lo que yo logré escuchar en esa jugada fue que Gilabert le dijo: 'no me vengai a hablar feo', 'no me mirís feo'no 'negro feo', pero, cláro, la adrenalina está a 100 y Rolín se calentó, se volvió loco. No sé si venía de antes o por el ruido del estadio se escuchó mal o no. Tampoco si ya habían tenido roces en otra jugada", agregó.

De igual manera, detalló que Gilabert estaba con cierto descontrol. "No sé si la palabra es 'nervioso', pero se complicaba solo. Ayer tendió mucho a corregir, al diálogo, a parar mucho el partido".

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