Hace un tiempo Eduardo Galeano concedió una entrevista para La Nación de Argentina, en donde se atrevió a elaborar una teoría para explicar el talento de uno de los mejores futbolistas del mundo.
Los elogios para el “10” de Barcelona fueron tan bien recibidos que al escuchar sus dichos le envió una camiseta del Barcelona de regalo.
La entrevista
-¿Cuáles son sus infiernos?
-Tengo un cielo y un infierno... [sonríe] que se alimentan mutuamente. ¿Te imaginás qué sería de Dios sin el diablo, pobre? Se iría a un fondo de jubilados, tendría que retirarse. Es como imaginar a River sin Boca o a Boca sin River.
-Entiendo. Pero tiene la desgracia de que lo está entrevistando una persona muy poco futbolera.
-Eso te salva de muchas angustias [risas]. Lo que pasa es que el fútbol da alegrías, no creas. Y da placer. Bien jugado, da placer. Ver jugar a Messi da placer.
-Hace rato que, para usted, verlo a Messi es una fiesta.
Incluso inventé una teoría, que se la hice llegar a él a través del director técnico de la selección: así como Maradona lleva la pelota atada al pie, Messi lleva la pelota dentro del pie. Lo cual es un fenómeno físico [se ríe, sus propias carcajadas lo interrumpen]. Inverosímil. La frase le llegó. Y se ve que le gustó, porque me mandó una camiseta de regalo. Científicamente es imposible., ¡pero es la verdad!
Galeano: Un méndigo del fútbol
El autor del mítico libro, "El fútbol a sol y sombra", cultivó su admiración por el balompié cada vez que pudo y frases dedicadas a este deporte son miles, pero quizás una que resume su dicha fue: Un méndigo del fútbol.
"Han pasado los años, y a la larga he terminado por asumir mi identidad: yo no soy más que un mendigo de buen fútbol. Voy por el mundo sombrero en mano, y en los estadios suplico: “Una linda jugadita, por el amor de Dios”. Y cuando el buen fútbol ocurre, agradezco el milagro sin que me importe un rábano cuál es el club o el país que me lo ofrece.
