El modus operandi se repite y la lista de víctimas aumenta.

Y el último nombre en sumarse a la misma es el de Karim Benzema, quien este miércoles sufrió un robo a su domiciliomientras jugaba con el Real Madrid el partido de vuelta de las semifinales de la Copa del Rey frente al Barcelona.

Fue una noche para olvidar para el delantero francés que tampoco pudo evitar la eliminación tras perder 3-0 contra el conjunto catalán.

Hace dos semanasle ocurrió lo mismo a Kevin Prince Boateng, fichado por el Barcelona en enero, a quien robaron cuando disputaba un partido contra el Valladolid por la Liga española.

Parecido a lo que le pasó a su compañero Jordi Alba el pasado mes de noviembre.

El lateral se encontraba concentrado en Italia para un partido de la Champions League contra el Inter cuando los ladrones entraron en la parte superior de su casa y lograron forzar la caja fuerte.

En Francia

El problema no es exclusivo de España y futbolistas en otros países están con como lo demuestran las cuatro denuncias que hubo en Francia la semana pasada.

Según informó la fiscalía de Nanterre a las afueras de de París el pasado domingo, la casa del brasileño Dani Alves fue desvalijada cuando jugaba un partido con el PSG frente al Montpellier en el estadio Parque de los Príncipes de la capital francesa.

El diario L'Equipe informó que los atracadores se llevaron objetos y dinero por un valor de decenas de miles de dólares.

Entretanto, los jugadores del Lyon Memphis Depay, Lucas Tousart y Pape Cheikh Diop fueron atracados mientras se enfrentaban el martes contra el Barcelona por la Liga de Campeones.

Otros nombres que han pasado por la misma situación son los del presidente del Marsella, Jacques-Henri Eyraud, a principio de este mes, y los de los jugadores del París Saint-Germain Eric Maxim Choupo-Moting (dos veces en noviembre y diciembre) y Thiago Silva (diciembre).

En Inglaterra

La práctica de entrar a las casas de los futbolistas mientras ellos están concentrados con sus equipos no es nueva y en la región del noroeste de Inglaterra es un problema recurrente.

El último caso reportado es el del senegalés Sadio Mané, quien sufrió el robo de relojes, celulares, y las llaves de sus automóviles cuando se encontraba en el terreno de juego en Anfield jugando contra el Bayern Múnich por la Liga de Campeones, la misma noche en la que ocurrieron los atracos en Lyon.

Mané, quien ya había sido robado en 2017, ya formaba parte de una larga lista de más de 20 futbolistas del Liverpool y de otros clubes de la región que han sido víctimas de la delincuencia en los últimos 15 años.

Roberto Firmino, Steven Gerrard y Pepe Reina se encuentran en ella, al igual que Romelu Lukaku, Wayne Rooney o el paraguayo Roque Santa Cruz, a quien le entraron a robar en su casa en diciembre de 2008 cuando jugaba para el Blackburn Rovers.

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