"Todo esto se desató en cosa de segundos. Terminando la canción nos dimos cuenta de que a algunos camarógrafos les dieron la orden de salir a la calle tras escucharse a muchos policías", relató a EFE el chileno Iván Órdenes, técnico de sonido del Canal 7, ubicado justo frente a la cafetería Lindt que sufrió la toma de rehenes de sus empleados y personal en Sidney.
Hasta ahora, las autoridades no han precisado la autoría del ataque -sólo han dicho que se trata de un hombre armado- ni el número de rehenes, aunque desde la administración del local se ha precisado que se trataría de 40 las personas afectadas.
Al ser consultado por lo que le tocó ver al salir a la calle tras la orden de evacuación, Órdenes relató que no sólo apreció una gran cantidad de policías sino que alcanzó a ver cómo dos personas en el local -presuntos rehenes- sostenían un lienzo con una inscripción en árabe.
"En la calle se veía una gran cantidad de agentes y de miembros de los escuadrones para desactivación de explosivos", afirmó.
Por ahora la policía australiana sigue atenta al desarrollo de los acontecimiento y ha evacuado gran parte de la zona financiera, incluída la emblemática Ópera de la ciudad. En tanto, el primer ministro, Tony Abbott, ha afirmado que no se conocen las motivaciones del autor del ataque que mantiene en máxima alerta al país.
