Una impresionante bola de fuego fue vista la noche del domingo 11 de diciembre cruzando el cielo del sur de España.
El fenómeno fue captado por varias cámaras de observatorios españoles y, según astrónomos citados por la agencia Europa Press, se trató de una roca de "dimensión considerable" que "ha podido sobrevivir a su paso por la atmósfera terrestre".
Se estima que el bólido se desplazó a una velocidad de unos 72.000 kilómetros a la hora y por su tamaño causó un gran efecto lumínico al entrar en la atmósfera.
Su brillo incluso fue superior al de la Luna llena.
Testigos también dijeron haber oído una explosión y un leve temblor tras el paso de la bola de fuego por el cielo.
Se cree que la roca o parte de ella alcanzó a caer en la Tierra sin desintegrarse.