Su propia historia, podría ser perfectamente otra película. Y no sólo por ser transgénero en un país que no estaba preparado, sino porque una vez que lo logró, se mentalizó siempre en llegar a esto que estamos viendo. Trabajó de mesera y de peluquera. Y fue justamente ahí donde recibió la invitación para este papel. Un lugar ubicado en Santiago Centro y donde sus dueños hoy también fueron protagonistas.
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