Cerca de un millón de peregrinos no dudaron en pagar sus mandas y pedir por lo que viene. Una jornada de reflexión que para muchos se repite todos los años como parte de la tradición.
Etiquetas de esta nota
Cerca de un millón de peregrinos no dudaron en pagar sus mandas y pedir por lo que viene. Una jornada de reflexión que para muchos se repite todos los años como parte de la tradición.