El llamado "caso lencería" no termina por escribir nuevos y sorprendentes capítulos. Fuimos hasta la región del Biobío para ver algunos de los trabajos que realizó la fundación por la cual está cuestionada Camila Polizzi. Entre ellos, registramos una dudosa capacitación a diversos vecinos para, escuche bien, plantar flores en una plaza de la ciudad. Además, pudimos constatar la posibilidad de que se haya tenido conocimiento en la Gobernación de todas estas presuntas irregularidades en abril pasado, pero que sólo se dio cuenta al Ministerio Público cuatro meses después.
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