Una nueva denuncia de abusos sexuales remece a la Iglesia. Ahora es un trabajador de 40 años el que asegura que un presbítero lo drogó y abusó en una habitación dentro de la Catedral Metropolitana. Todo habría ocurrido el 2015, sin embargo solo trascendió este año tras una demanda. Hoy se investigan otros abusos sexuales en contra de menores de edad y hasta almacenamiento de material pornográfico por parte del padre Tito Rivera.
Etiquetas de esta nota
