Agradecimiento y perdón son las palabras que marcaron la despedida del cardenal Ricardo Ezzati este domingo en la Catedral Metropolitana. El nuevo administrador apostólico, Celestino Aós ofició su primera misa como la máxima autoridad eclesiástica de Santiago, en la que calificó los abusos cometidos por integrantes de la Iglesia como intolerables, anunciando reformas profundas.
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