Hace tan sólo dos semanas, cientos de familias llegaron hasta el Cerro Renca para demarcar una toma de terrenos y construir sus viviendas. Hoy el lugar es un verdadero campamento, en el que más de 360 familias chilenas y extranjeras están construyendo una mini ciudad. Dicen que no tienen dinero para la casa propia y que tampoco les alcanza para arrendar.
Etiquetas de esta nota