El gobierno descartó el cierre de las fronteras aéreas de nuestro país, pero hizo un llamado a no viajar a no ser que sea estrictamente necesario. Además, endureció las medidas para los viajeros: desde el 31 de marzo todas las personas que ingresen Chile, nacionales o extranjeros, deberán trasladarse a un hotel de tránsito por cinco días para hacer cuarentena, hacerse un test de PCR y financiar de su bolsillo los costos asociados.
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